Es habitual relacionar la piña con platos dulces como los postres. Esta fruta, nutritiva y muy refrescante, es ideal para elaborar recetas dulces y cambiar así el registro de los primeros platos en las comidas, tradicionalmente salados. Sin embargo, la piña es un producto tan versátil que puede ser utilizada para algo más que un tiramisú original o un postre helado. Si quieres conocer todas las posibilidades de esta fruta tropical, presta atención a estas fantásticas recetas de platos salados con piña.

Cualquiera que piense en un plato salado con piña se acordará antes o después de la famosa pizza hawaiana, elaborada a base de jamón york o pechuga de pavo y piña como principales ingredientes. El resto de ingredientes necesarios son evidentes: masa de pizza, salsa de tomate y queso mozarella, elementos habituales en casi todas las pizzas. Pero las posibilidades de la piña al natural y la piña en almíbar no terminan aquí; podemos utilizar esta fruta para elaborar ensaladas diferentes y guarniciones para platos complejos. ¿Quieres algunas ideas? Te las ofrecemos a continuación.

Puedes elaborar una ensalada de piña, pollo y cacahuetes, muy sabrosa y refrescante, ideal para el verano. Para ello, corta la pechuga de pollo en tiras y cocínalas a la plancha en una sartén. Si te gustan los matices orientales, puedes macerar el pollo en salsa de soja y rebozarlo en semillas de sésamo antes de cocinarlo. Cuando el pollo esté listo, resérvalo en un recipiente, añadiendo una mezcla de ensaladas, unos cuantos cacahuetes y algunos trozos de piña en su jugo. Si todavía quieres más sabor, prueba a hacer una vinagreta a base de aceite de cacahuete y hierbabuena; ¡no te arrepentirás!

También puedes hacer un fantástico ceviche de salmón, piña y aguacate. El ceviche es originario de diversos países latinoamericanos y un auténtico regalo para cualquier paladar. Para elaborarlo, corta el salmón en dados y ponlo a macerar con zumo de limón la noche anterior. Cuando esté listo, solo tendrás que mezclarlo con unos dados de aguacate, unos trocitos de piña en su jugo, cebolla picada y cilantro para disfrutar de uno de los buques insignia de la gastronomía latinoamericana.

Por último, si lo que quieres es utilizar la piña en un plato principal, prueba a hacer unas costillas de cerdo glaseadas con piña y salsa hoisin, utilizando el almíbar de la piña para conseguir un resultado excepcional. Si no controlas bien la técnica del glaseado, puedes hacer otro plato riquísimo: un ossobuco con piña y jengibre. Primero tienes que marcar la carne, luego cocerla con especias y vino hasta que éste reduzca, añadiendo la piña en almíbar, el jengibre y el caldo a mitad de cocción.

Si no incorporas la piña en tus platos salados no será por falta de ideas. Además, existen muchos motivos por los que añadir esta fruta en los platos: es nutritiva, refrescante y saludable. ¿Quieres más razones? Pues visita esta página web. ¿Ya sabes qué plato con piña cocinarás? Cuando lo hagas, recuerda compartir con nosotros las imágenes del resultado. ¡Hasta pronto!